Después de convertirme por accidente, en asesora sentimental de media Barcelona.
Comprendí que Aladín, era todo lo opuesto a mí.
Con el tiempo el lado MasculinoBARRAmachoibéricoBARRAimbéciles, se convierten en "Yo todo lo arreglo!".
Y nosotras, esas feministas inconformistas, nos convertimos en un comité de mejora instantánea.
Son esas frases del día a día, la que nos minan la moral, las que nos cabrean hasta llegar a límites insospechados.
Las que no se dan cuenta, pero las sueltan.
Y cómo el lado masculino, me tiene bastante harta últimamente...
Vamos a enseñarles, que no hay que decir.
En esas situaciones..
Lo mejor, es morderse la lengua chicos.
Con lo fácil, que es morderse la lengua de vez en cuando y no soltar esas burradas tan grandes.
Aunque no quieras escucharme...
FINGE UN POCO, YO FINJO CUÁNDO ME ACUESTO CONTIGO...
Y TÚ QUE QUEDAS TAN CONTENTO!!!
A VER CUÁNDO APRENDEN!
CUÁNDO DICEN...
1.
"No deberías preocuparte tanto por eso..."
- Mira
bonito de cara, yo decido porque preocuparme y en qué medida.
Que a
ti te sea indiferente, es otra cosa.
2.
"No hay para tanto!!!" (Esta es de
cosecha/experiencia propia)
- No! Solo
estabas explorando con tu lengua la garganta de la rubia..
Pero no
hay para tanto, que cosas tengo no?!
(Respiro
mucho mejor, después de decir esto..)
3.
"Muy bien, yo limpio el comedor... contenta!?"
-Evidentemente
bonito! Espero que tu sofá o en su defecto tu mesa de ordenador, no te eche de
menos y se pongan celosos.
4.
"Si vas a quejarte después, no lo hagas."
-Claro..
Es que ellos también son videntes, cómo no se nos había ocurrido antes!
5.
"Si no eres feliz, lo dejamos."
-Sería
feliz, si pusieras de tu parte para tirar esto hacía delante....
Pero
vamos, que tú días malos, por lo que se ve no tienes no?
6.
"Te importaría ir al grano?"
-Sí, sí
que me importa... Porque si quiero... me explayo!
7.
"Eso no fue lo que paso.. "
-Claro,
y tú te acuerdas igual de bien que del cumpleaños de tu madre no?
Por
ejemplo; Si en
lugar de decir, eso no fue lo que paso, no dices nada!
Quedas
bien, o en su defecto di que no lo recuerdas. Pero luego intenta acordarte del
cumpleaños de tu madre, porque la señora se queda esperando al teléfono toda la
tarde para que su querido hijo del alma la llame.
Y al
final he de ser yo, quien la llame y te excuse porque estás trabajando o liado,
cuando en verdad la única neurona que tiene tu cerebro está viendo esa
apasionante serie en tv.
Nosotras
también tenemos lo nuestro... EVIDENTEMENTE!
Pero...
hoy no toca... Ni mañana tampoco!
Y al
final...
Mientras
voy buscando mi media naranja.. voy machacando mandarinas!
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