El sábado pasado me replantee olvidarme de mi Peter Pan e irme directamente con el Capitán Garfio, sin medias tintas, directamente a su barco malvado.
El enemigo de mi amado Peter Pan...( ver cuento: Matemos a campanilla)
Una noche de sexo salvaje y eterna bajo los brazos de un Capitán Garfio muy especial, mucho mas fuerte y más convincente que el pobre Peter.
De camino a mi cita con el Capitán Garfio, observe una nueva tienda de juguetes.. para personas adultas necesitadas de cosas que muchos príncipes con mallas no pueden ofrecer.
No me lo pensé dos veces y entre, entre en la mezcla de fábrica del placer y tienda de barrio.
Juguetes pequeños y otros no tan pequeños, que se apoderan de las mesitas de noches de princesas inconformistas que buscan como yo a un Capitán Gardio, para desafiar a la lujuria y dejar atrás a su Peter Pan particular, más bien infantil y romanticón, meloso y hasta pesado de tanto en tanto.
Hay artículos para cada tipo de princesa, patitos amarillos para las amantes de los animales.
Barras de labios vibratorias de varias velocidades para las más coquetas...
Conocer a cada tipo de princesa, es conocer también sus juguetes sexuales.
Qué pensará Peter de todo esto?
Seguramente se ruborizaría hasta el punto de parecer un tomate de rama de los que venden a 1,45€/K. en la frutería del barrio.
Y después de esto me pregunto.. Porque muchas mujeres buscan un vibrador/consolador en vez de un Capitán Garfio?
No quedarán Capitanes en su barrio??
Queme la visa y me lleve de todo un poco... Juguetes.. preservativos de diferentes colores y formas, aceites especiales para quemar todos y cada un resto de Peter Pan.
Que le parecería a mi Capitán Garfio un poco de acción??
Después de una noche de sexo y pasión, lo abandone de madrugada en su barco particular y emprendí la huida hacia mi casa, como una malvada bruja que teme ver el sol, o simplemente que no quiere despertarse al lado de un Capitán que puede metamorfosearse en un nuevo Peter Pan.
Después de una noche de sexo y pasión, lo abandone de madrugada en su barco particular y emprendí la huida hacia mi casa, como una malvada bruja que teme ver el sol, o simplemente que no quiere despertarse al lado de un Capitán que puede metamorfosearse en un nuevo Peter Pan.
Después de aquella noche, tengo muy claro que a partir de ahora.. prefiero las noches salvajes con Garfio, a las noches románticas, aburridas y empalagosas con Peter!
estaria bien una mezcla de los dos..
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